Nuestra entrada de hoy va a tratar sobre la Biblioteca Real de
Nínive, más conocida como Biblioteca de Ashurbanipal, que se encontraba en la
ciudad de Nínive en Asiria (actualmente Irak). Los fondos recuperados tras
varias excavaciones arqueológicas se encuentran depositados en el Museo Británico. A continuación os dejo un enlace a YouTube para que podáis ver un pequeño resumen de la exhibición sobre Ashurbanipal en dicho museo.
Fuente: https://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/8/8b/Library_of_Ashurbanipal.jpg
Ashurbanipal fue un rey
de Asiria (668 a.C.- 627 a.C.) al que muchos autores le atribuyen la creación
de la biblioteca que lleva su nombre. Sin embargo, fueron sus antecesores los
que la iniciaron, si bien Ashurbanipal fue el gran impulsor.
Ya en tiempos del rey Tiglet Pileser, sobre 1100 a.C., se había establecido una biblioteca en un templo de Ashur (Oliva, 2003) y más tarde se fue enriqueciendo durante los reinados de Sargón II, Senaquerib, Asarhaddon, Ashurbanipal, Ashur-etil-ilani y Sin-shar-ishkun (Historiae, 2018).
Ya en tiempos del rey Tiglet Pileser, sobre 1100 a.C., se había establecido una biblioteca en un templo de Ashur (Oliva, 2003) y más tarde se fue enriqueciendo durante los reinados de Sargón II, Senaquerib, Asarhaddon, Ashurbanipal, Ashur-etil-ilani y Sin-shar-ishkun (Historiae, 2018).
Relieve del rey Ashurbanipal.
Fuente: https://es.wikipedia.org/wiki/Asurbanipal#/media/Archivo:Assurbanipal_op_jacht.jpg
Con la aspiración de
acumular bajo un mismo techo todo el saber de la época, Ashurbanipal creó la más
completa biblioteca de Estado que se conoce de la antigua Mesopotamia. En una
carta en que queda patente su deseo de conocer el pasado, Ashurbanipal ordena a
sus enviados que recopilen rituales, oraciones, inscripciones en piedra y
cualquier cosa que fuera útil para la realeza (Baquero, 2019).
La biblioteca, que
albergaba más de 20.000 tablillas de arcilla, fue destruida en el año 612 a.C.
por las fuerzas babilonias que arrasaron Nínive. “Todos los conocimientos
albergados en su biblioteca fueron destruidos. Textos de escritura cuneiforme
sobre historia, arte, literatura, ciencias, religión, magia quedaron hechos
trizas” (Biblioteca Histórica de la Universidad de Salamanca, 2019).
La mayoría de las tablillas eran copias realizadas para ser depositadas en los archivos de la biblioteca y sus fondos estaban compuestos fundamentalmente por:
La mayoría de las tablillas eran copias realizadas para ser depositadas en los archivos de la biblioteca y sus fondos estaban compuestos fundamentalmente por:
· Series de presagios
· Listas de signos cuneiformes
· Lista de sinónimos
· Vocabularios y textos bilingües (sumerio y acadio)
· Mitos y epopeyas de la tradición babilónica (a destacar el Mito de la creación y la Epopeya de Gilgamesh, siendo esta
última la obra narrativa más antigua que se conserva)
· Versión asiria del Diluvio Universal (Oliva, 2003)
Tablilla conteniendo parte de la Epopeya de Gilgamesh.
Fuente: https://commons.wikimedia.org/wiki/File:Library_of_Ashurbanipal_The_Flood_Tablet.jpg
· Versión asiria del Diluvio Universal (Oliva, 2003)
Tablilla conteniendo parte de la Epopeya de Gilgamesh.
Fuente: https://commons.wikimedia.org/wiki/File:Library_of_Ashurbanipal_The_Flood_Tablet.jpg
Los primeros restos de la
biblioteca fueron descubiertos en el siglo XIX durante unas excavaciones
arqueológicas. En 1853, en el palacio de Senaquerib se localiza la Biblioteca
de Ashurbanipal, con 20.000 fragmentos de tablillas. Poco antes, en 1849, ya se
había dado con una primera biblioteca, y en 1927 se descubrió una tercera
(Baquero, 2019).
Empero, no todos los fondos de la biblioteca se trasladaron al Museo Británico, sino que gran parte de ellos se encontraban en el Museo de Mosul en Irak, pero sufrieron la ira del Estado Islámico (ISIS) que en 2015 asolaron el museo y destruyeron piezas de los siglos VIII y VII a.C. con taladros y martillos (Cicardi, 2017).
Empero, no todos los fondos de la biblioteca se trasladaron al Museo Británico, sino que gran parte de ellos se encontraban en el Museo de Mosul en Irak, pero sufrieron la ira del Estado Islámico (ISIS) que en 2015 asolaron el museo y destruyeron piezas de los siglos VIII y VII a.C. con taladros y martillos (Cicardi, 2017).
Plano de Nínive. La biblioteca se encontraba en KUYUNJIK
Actualmente, todavía
quedan fragmentos de las tablillas de arcilla que no se han podido descifrar,
pero el investigador de la Ludwig-Maximilians Universitat de Múnich, Enrique
Jiménez, está aplicando un método de inteligencia artificial. “Lleva meses
construyendo una base de datos que cuenta ya con 11.000 fragmentos de tablillas
que no ha leído nunca nadie. Su objetivo es ambicioso: reconstruir los inicios
de la literatura mundial con la ayuda de la inteligencia artificial. Mientras
indexa imágenes e información, Jiménez está desarrollando paralelamente un
algoritmo para poder llenar los vacíos, es decir, identificar exactamente
aquellas piezas que van juntas” (Biblioteca Histórica de la Universidad de
Salamanca, 2019).
Por otra parte, desde
principios del siglo XXI se está llevando a cabo el Proyecto Biblioteca de Ashurbanipal, con el objetivo de reconstruir
el contenido de la biblioteca de Nínive. El Proyecto se estableció en 2002 como
una cooperación a largo plazo con la Universidad de Mosul, Irak. La primera
etapa fue financiada por Townley Group of British Museum Friends. La Dra.
Jeanette Fincke elaboró una lista de las 3500 tablillas de la biblioteca en escritura
babilónica. En una segunda fase, Fincke centró su atención en los textos
astrológicos de adivinación de Nínive en escritura asiria. Una tercera fase de
actividad, nuevamente financiada por Townley Group, contó con la inestimable
ayuda del profesor Riekele Borger, profesor emérito de asiriología en la
Universidad de Gotinga. Desde 2009-2013, se han producido imágenes digitales de
alta resolución de todas las tabletas de la biblioteca. Desde 2014 la actividad
se ha centrado en la actualización y mejora del catálogo. Este catálogo sirve
como base para nuevas investigaciones sobre la composición y naturaleza de la biblioteca
(Taylor, 2019).
Para concluir podemos
señalar que la Biblioteca de Ashurbanipal, la mayor biblioteca descubierta en
Oriente Próximo, nos ofrece a través de su legado un profundo conocimiento de
la cultura mesopotámica y constituyó la pieza clave para descifrar la escritura
cuneiforme.
Referencias
Baquero, A. (2019). Renacentista avant la lettre. Historia y vida, 611, 24-29.
Biblioteca Histórica de la Universidad de Salamanca. (23 de agosto de 2019). Un Sistema algorítmico permite completar la
escritura de antiquísimas tablillas de arcilla. El Mercurio salmantino.
Cicardi, F. (27 de enero de 2017). Nínive, la antigua capital asiria, reducida a escombros por el Estado Islámico. Heraldo.
escombros-por-estado-islamico-1155788-306.html
Historiae. (2018). La Biblioteca de Nínive, la mayor biblioteca de la Antigüedad. Consultado el 25 de octubre de 2020.
Historiae. (2018). La Biblioteca de Nínive, la mayor biblioteca de la Antigüedad. Consultado el 25 de octubre de 2020.
Oliva Moreno, J. (2003). George Smith y la biblioteca de Ashurbanipal. Boletín de la Asociación Española de Orientalistas,
39, 53-66. Taylor,
J. (2019). Historia del proyecto. Proyecto
de la Biblioteca Ashurbanipal.
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